miércoles, 13 de mayo de 2009

El juguete preferido


Conocido como “objeto transicional”


En algún momento tu hijo elige un juguete. Ese muñeco de trapo, osito de peluche, una frazadita o algún objeto blando y suave que lo acompaña en todo, para dormir, para adaptarse al jardín, o para aferrarse cuando la mamá sale de la casa.
Este juguete es muy importante para él y requiere cuidados especiales, no se puede perder por nada del mundo!
Este objeto nos demuestra que el niño lleva a su madre dentro de él, es capaz de separarse de ella porque hay un objeto que le da seguridad, que lo acompaña en momentos importantes como ir al jardín, o irse a dormir.
Cumple con ciertas características que te contamos a continuación:
Lo elige el niño, no el adulto. Pero es el adulto el que permite que el niño juegue, favorece ese espacio y le acerca los juguetes.
Es un objeto cálido, blando, suave, mullido.
No se reemplaza por otro cualquiera, es único, preferido de verdad!
Se “esfuma”, no se pierde ni se abandona. Un día el niño se despega, y ese día sabremos que está más grande, que no necesita vernos ni ver ese juguete para separarse de nosotros, porque nos lleva dentro.
Lic. Valeria Rochistein